Evolución de la textura durante los procesos de teñido:
La textura del tejido de punto jersey sufre una serie de modificaciones en algún momento de las técnicas de teñido, influenciadas por diversos factores, incluido el tipo de tinte utilizado, las técnicas de teñido y las características del propio material.
Absorción de moléculas de tinte:
A medida que se agrega el tejido de punto Jersey al recipiente de tinte, las fibras absorben moléculas de tinte. El proceso de absorción varía según la composición de la fibra, y las fibras naturales, como el algodón, absorben tintes en lugar de las fibras artificiales, como el poliéster.
Hinchazón de Fibras:
La forma de teñir implica la inmersión de la tela en agua y el tinte. Esto hace que las fibras del interior de la tela se hinchen. El grado de hinchamiento depende del tipo de fibra, y este hinchamiento puede afectar la textura general al cambiar brevemente la disposición de las fibras.
Efecto sobre la estructura del bucle:
En el caso del lado loco de Tejido de punto , el sistema de teñido también puede afectar la apariencia de los bucles. La absorción de tinte y el hinchamiento de las fibras pueden tener un efecto en la apertura o tensión de los bucles, contribuyendo a cambios en la textura en el lado opuesto.
Penetración del tinte:
Los tintes deben penetrar muy bien en el material para obtener una coloración uniforme. La penetración de tintes en la forma de la tela puede afectar la forma en que la luz interactúa con las fibras, alterando probablemente la percepción de la textura.
Consideraciones para mantener o mejorar la textura original:
Si bien el teñido introduce ajustes en la tela, los fabricantes frecuentemente no olvidan diferentes factores para mantener o mejorar la textura auténtica del tejido de punto durante todo el proceso de teñido:
Pretratamiento para el acondicionamiento de fibras:
Antes del teñido, los productores también pueden contratar métodos de pretratamiento para acondicionar las fibras. Esto puede contener tratamientos para mejorar la alineación de las fibras y reducir las inconsistencias en la textura, asegurando una mejor absorción uniforme del tinte.
Selección y compatibilidad de tintes:
El deseo del tinte es importante para mantener la textura auténtica. Los fabricantes también pueden optar por tintes reconocidos por su efecto mínimo en el tacto y la forma del tejido. Los tintes reactivos, por ejemplo, se unen químicamente a las fibras, lo que a menudo resulta en una alteración menor de la textura original.
Técnicas de teñido controlado:
El empleo de técnicas de teñido controladas, incluido el teñido con bajo contenido de licor o teñido por agotamiento, permite a los fabricantes controlar la cantidad de agua y tinte utilizados en algún punto del proceso. Este control puede minimizar el efecto sobre la textura de la tela al reducir la hinchazón excesiva y garantizar una distribución uniforme del tinte.
Control de temperatura y pH:
La temperatura y el pH juegan un papel importante en el proceso de teñido. Al controlar con cautela esos parámetros, los productores pueden afectar la tasa de absorción y fijación del tinte. Una gestión óptima permite lograr colores vibrantes sin comprometer la textura única.
Procesos de acabado post-teñido:
Después del teñido, se pueden implementar métodos posteriores al acabado para fijar el tono y embellecer la textura. Se pueden contratar tratamientos suavizantes o acondicionadores para mitigar la rigidez del tejido producida durante el teñido, asegurándose de que la tela conserve el tacto deseado.
Estas consideraciones son vitales para entregar un tejido de punto teñido que cumpla con todas las expectativas estéticas y táctiles.